Todos tenemos ciudades que queremos visitar y que componen nuestra larga lista de los sitios a ver una vez en su vida. La mía es larguísima. Apuesto que la tuya también 😉 Visitar Valencia siempre ha sido un proyecto desde que me expatrié a España. Una amiga del instituto que hizo su erasmus allí, siempre me habló bien de esta ciudad, pero es sobre todo Las Fallas que me atraían. El último mes de marzo, por fin, pude visitar la ciudad con una amiga durante un fin de semana. Aquí, mi estancia en 9 puntos.
1. Las Fallas
Las Fallas son uno de los eventos estrella de la vida cultural y fiestera española. Un momento especial en la vida de Valencia, que hizo famosa la ciudad, dentro de España como fuera del país.
Se trata de unas estructuras de papel maché, sostenidas por madera, creadas por las comisiones falleras. Estas son asociaciones que, durante un año, buscan recursos financieros para pagar la fiesta y sus propios monumentos. Normalmente, tratan de temas de actualidad y el tono suele ser satírico. Las fallas pueden medir hasta 30 metros. La figura central está rodeada de otras más pequeñas.
Frente a estos impresionantes monumentos, uno/a se da cuenta del trabajo increíble y minucioso que hacen los carpinteros, pintores y escultores durante varias semanas. La noche de la Crema, se queman y valencianos y turistas vienen a asistir al espectáculo.
La fiesta no solo es eso. También, uno/a puede asistir a un maravilloso fuego artificial y a otros eventos pirotécnicos. La gente pasa su tiempo a tirar petardos a cualquier hora del día y de la noche y cuando el sol desaparece empieza a andar por las casetas/bares que se encuentran en la calle, con mucha música de fondo.
¿Por qué no me gustaron las Fallas?
Los monumentos me encantaron. Sin embargo, no me gustó la fiesta. ¿Por qué? Se trata de una fiesta, en parte, turística donde muchos vienen solamente a beber y salir de fiesta. La cantidad de adolescentes muy jóvenes borrachos por la noche me molestó bastante también y no tengo nada en contra de la gente que bebe, yo misma lo hago a menudo. Y los petardos a cualquier momento, en cualquier sitio, eso acaba por cansarte. Hasta hubo gente que casi nos los tiraban encima. Y que decir de la gente pegada a su Smartphone y que pasa su tiempo grabando el fuego artificial y la Crema… Es complicado apreciar el espectáculo cuando solo ves pantallas de móviles.
Creo que para disfrutar de la fiesta y apreciarla correctamente, hay que andar con valencianos. Ellos saben todo de su fiesta y conocen los sitios donde ir para pasar un buen momento.
2. La Lonja de la Seda
También se llama Lonja de los Mercaderes. Se trata de una obra de estilo gótico civil valenciano, ubicada en el centro de Valencia. Es el único monumento de la ciudad clasificado en el Patrimonio de la Humanidad. Por lo tanto, es un sitio imprescindible para los turistas.
Construida entre 1482 y 1548, es un monument que fue testigo de la prosperidad comercial de la ciudad . También, fue un simbolo de poder para atraer a comerciantes durant un momento más complicado para la economía local.
Es posible visitar el monumento gratis los domingos y festivos de 10 a 14. Su pequeño jardin es perfecto para descansar a la sombra de los naranjos.
3. Los Mercados
Me encantan los mercados desde mi visita de la Boqueria en Barcelona hace muchos años. A cada vez, que estoy en una ciudad nueva, tengo que incluirlos en mi recorrido.
Empezamos por el Mercado Colon. A principios del siglo 20, se hizo necesario construir un mercado en esta parte de Valencia. Se inauguró durante la noche buena del 1916. Decadas más tarde, la ciudad decidió rehabilitarle para convertirle en un espacio más actual: restaurantes, bares y tiendas se encuentran a unos pasos del pescado y de la carne fresca. Mi móvil se apagó una vez dentro así que no tengo ninguna foto del interior 🙁
Se tendría que dar solo un adjetivo para definir el Mercado Central de Valencia sería «magnifico». De estilo modernista, este mercado fue también construido a principios del siglo 20. Más de cien comerciantes vienen a vender sus productos frescos y permiten a los visitantes de usar todos sus sentidos durante la visita. cinq sens. Ce qui en fait un lieu incroyable, c’est sa superbe coupole.
5. Las torres
Monumentos emblemáticos de la ciudad, las Torres de Serranos fueron construidas en el siglo 14. De estilo gótico valenciano, hacían parte de la muralla cristiana de Valencia. Se puede subir para ver las vistas de los alrededores.
En cuanto a las Torres de Quart, eran también parte de la muralla. Construidas un siglo mas tarde, son del mismo estilo que las Serranos.
6. Plaza de la Reina y Plaza de la Virgen
La plaza de la Reina est una de las plazas mas vivas de la ciudad. Desde aquí, uno tiene una bonita vista sobre la catedral. Es un lugar perfecto para hacer un picnic o una siesta a la sombra de los arboles.
En cuanto a la plaza de la virgen, es un lugar impresionante gracias a la presencia de la catedral, de la Basilica de la Virgen de los Desamparados y el Palacio de la Generalidad.
7. Perderse en el centro
Valencia esta repleta de tesoros arquitecturales y de plazas encantadores. De dia, se puede admirar las bonitas fachadas de los edificios que el inmenso cielo azul pone en valor y de noches, los inmuebles se iluminan para que el visitante descubra otra faceta de la ciudad.
Es esencial perderse en las calles de Valencia y levantar la cabeza para admirar todo lo que la ciudad puede ofrecer a los turistas.
8. El Cabanyal
Cansado/a del centro? Es el momento de tomar un autobus y de irse a descubrir el antiguo barrio de la ciudad.
A unos metros del mar, se encuentran los Poblados Marítimos y el mas conocido de ellos, es Cabanyal. Casi los destruyen pero siguen de pie. El barrio, de hecho, se convertio en un verdadero sitio turístico.
Sus largas calles paralelas y compuestas por las casas coloridas, donde vivían los pescadores, lo convirtieron en un Noting Hill made in Spain donde se suceden las fachadas Instagram.
9. Playa del Cabanyal
Valencia es muy conocida por su playas. Dado que estábamos cerca, nos fuimos a la playa de las Arenas también llamada playa del Cabanyal, pero con el frio de marzo no era el momento de disfrutar de su arena fina. La playa esta bordeada por un paseo marítimo donde se encuentran unos sitios para beber y comer una paella, la especialidad de la ciudad.
Espero que te he dado ganas de visitar Valencia con este post. Hay solo una cosa que no me dio tiempo de ver durante estos dos días de visita muy intensos, es La Ciudad de las Artes y las Ciencias. Se trata de un complejo de ocio que tiene monumentos modernos y espectaculares.